La compañía canadiense BlackBerry, anteriormente conocida como RIM hasta que adoptó el nombre de sus terminales, no ha sabido capear la crisis a la que se ha enfrentado estos últimos años, en los que no supo reaccionar a tiempo ante la revolución que supuso la llegada de iOS y Android al mercado. Hace unos días os informamos de los rumores que apuntaban a que la compañía podía dejar de fabricar sus propios terminales, rumor que finalmente se ha confirmado. Esto no supone el cierre de la división móvil de la compañía que a partir de ahora dependerá de terceros para fabricar sus terminales y dejará de invertir más de la mitad de sus ingresos en el departamento de I+D que se encargaba de la fabricación y diseño de los últimos terminales que la compañía lanzó al mercado.
La llegada de John Chen como máximo responsable de la compañía suponía un cambio de aires, y ha sido en encargado de anunciar el fin de la fabricación de los terminales de la compañía, de esta forma realmente no sabemos a que se va a dedicar la compañía en el mundo de los smartphones porque si el hardware lo pone una empresa externa y el software es el de Android, parece que los canadienses vayan a licenciar el nombre para únicamente obtener ingresos por su uso arriesgando lo mínimo.
El único terminal que los canadienses han lanzado al mercado y que podríamos considerar un smartphone a tener en cuenta fue el BlackBerry Priv, el primer modelo de la compañía con Android de serie pero con todos los servicios habituales de la compañía integrados en el software. Pero a pesar de las excelencias del terminal, el ofrecer únicamente un terminal de gama alta, le ha supuesto a la compañía entrar en una guerra donde únicamente se encuentra Samsung y Apple, con sus busques insignia. Nadie en su sano juicio, se gastaría el precio de un Samsung o un iPhone en un modelo de BlackBerry.