Parece que a los investigadores y científicos se les complica cada día más un tema olvidado durante mucho tiempo como puede ser el conseguir desarrollar baterías mucho mejores que nos permitan disfrutar de mayor autonomía en todos nuestros artículos electrónicos. Uno de los nuevos pasos en esta dirección lo acaba de dar el equipo de investigadores liderado por John Goodenough, co-inventor de las baterías de estado sólido.
Como detalle, comentarte que precisamente a esta persona le debemos las baterías de ión de litio o su peculiar estructura y ahora ha sido su equipo de investigadores, residentes de la Cockrell School of Engineering, quien acaba de publicar un nuevo paper donde se nos habla de unos experimentos con resultados ‘revolucionarios’ dentro de este sector.
John Goodenough, a sus 96 años, podría volver a revolucionar el mundo de las baterías.
Según ha comentado el propio John Goodenough sobre el uso de las baterías actuales:
El coste, la seguiridad, la densidad energética, las tasas de carga y descarga y los ciclos de vida son críticos para que los coches basados en baterías se puedan aprovechar masivamente. Creemos que nuestro descubrimiento soluciona muchos de los problemas inherentes a las baterías de hoy en día.
Si atendemos a los descrito en el artículo publicado, las baterías producidas en laboratorio por este equipo, basadas en celdas de estado sólido con electrolitos de cristal, permitirían utilizar un ánodo alcalino-metálico. Esto básicamente contribuye en gran medida a que una batería creada siguiendo esta estructura no solo permitiría dar soporte a la carga rápida, sino que además reduciría en gran medida su coste a la hora de ser fabricadas en gran escala.
Si ponemos todo esto en perspectiva, esta nuevas baterías, según los calculos tomados por el equipo, al parecer ofrecerían una densidad de carga hasta tres veces superior a las baterías convencionales, más de 1.200 ciclos de carga con baja resistencia a unas temperaturas que pueden oscilar entre los -20 ºC y los 60 ºC.