La batería es uno de los elementos clave para el buen funcionamiento de un ordenador portátil. Lo que nos permite trabajar y usar nuestro laptop sin estar conexión a la corriente eléctrica. Por eso hay que cuidarla bien. En este post presentamos 7 consejos para que la batería de tu portátil dure más.
Existen muchos tipos de baterías para portátiles (de iones de litio, de polímero de litio, de níquel-cadmio…), cada una con sus características propias, sus ventajas y sus desventajas. Sin embargo, los cuidados y precauciones de uso que debemos tener con ellas son prácticamente los mismos.
De hecho, hay una serie de factores comunes que afectan a su vida útil y a su rendimiento. Son los siguientes:
- Número de ciclos de carga: Las baterías de los portátiles suelen tener entre 300 y 500 ciclos. A partir de ahí, empiezan a degradarse progresivamente.
- Calor: El enemigo número de las baterías (y no solo las de los laptops) es la temperatura excesiva. Y uno de los principales factores de su desgaste.
- Descargas completas. Algunos tipos de batería se degradan cuando dejamos que se agoten por completo. Por eso siempre es preferible conectarlas a la corriente cuando bajen del umbral del 5%.
No es deseable vernos en la situación de tener que cambiar la batería de nuestro portátil, ya que puede ser bastante caro. Por eso resulta muy conveniente seguir una serie de recomendaciones como las que listamos a continuación, destinadas a prolongar su vida útil.
Consejos para cuidar el estado de la batería de tu portátil
Allá va una serie de consejos prácticos que nos van a ayudar a mejorar la duración de la batería de nuestro portátil, manteniéndola en buen estado y prolongando su vida útil:
Activar el modo «Ahorro de batería»
Casi todos los sistemas operativos modernos ofrecen a sus usuarios un modo de ahorro de batería o de bajo consumo. Cuando estemos utilizando el portátil sin tenerlo enchufado, es conveniente activarlo. Así es como puedes hacerlo:
En Windows:
- Primero vamos al menú de Configuración.
- Luego hacemos clic en «Sistema».
- Finalmente, seleccionamos «Batería» y activamos el modo de ahorro.
En macOS:
- Vamos a «Preferencias del sistema».
- Allí seleccionamos «Batería» y ajustamos el modo de bajo consumo.
Reducir el brillo de la pantalla
Dado que los monitores son uno de los elementos del ordenador que más energía consumen, reducir el brillo de la pantalla es un buen truco para aumentar significativamente la duración de la batería. Esto se puede lograr realizando ajustes en la configuración de brillo automático del portátil (si es que este tiene un sensor de luz ambiental), o bien de forma manual.
Optimizar opciones de energía
Otro de los consejos prácticos para cuidar de la batería de un portátil es configurar correctamente las opciones de energía. Así, podemos establecer que este entre en suspensión o hibernación después de un periodo corto de inactividad. Por ejemplo, después de 5 minutos sin usarlo.
También en este sentido, siempre conviene más poner el portátil en modo suspensión en lugar de apagarlo por completo. Y es que con la suspensión se consume menos energía que la que utilizamos durante el proceso de reiniciar el sistema.
Evitar temperaturas extremas
Tal vez la regla número uno para alargar la vida de cualquier dispositivo electrónico: evitar el sobrecalentamiento. Para que eso no afecta a nuestra batería, hay algunas cosas que podemos hacer: no dejar el portátil expuesto a pleno sol, ni colocarlos superficies que retengan el calor. Lo mejor es tenerlo siempre en habitaciones donde haya un ambiente fresco y bien ventilado.
Prescindir de aplicaciones y actualizaciones innecesarias
Ciertas aplicaciones, que ni siquiera usamos habitualmente, funcionan en segundo plano, consumiendo recursos y agotando la batería. Para preservar el estado de nuestra batería es conveniente cerrarlas. Se puede utilizar el Administrador de tareas (en el caso de Windows) o el Monitor de actividad (si usamos macOS) para identificar esos procesos innecesarios que consumen tanta energía y cerrarlos.
Por otra parte, y por los mismos motivos, también es buena idea desactivar las actualizaciones automáticas de software y de aplicaciones.
Usar navegadores optimizados
Cuando usamos los navegadores con múltiples pestañas abiertas y extensiones activadas, estamos consumiendo muchos recursos y poniendo nuestra batería a prueba. Por eso, además de cerrar las pestañas que no necesitemos, siempre será mejor usar navegadores más ligeros. Los mejores en este sentido son Microsoft Edge en el caso de Windows y Safari para macOS.
Desactivar conexiones innecesarias
Por último, un consejo útil de sentido común: hay que desactivar el WiFi y el Bluetooth si no los estamos utilizando. ¿Por qué? Pues porque mantenerlos activados puede resultar en un consumo de batería sin sentido, mientras se buscan constantemente redes o dispositivos. Incluso puede resultar muy conveniente poner el portátil en modo avión cuando no necesitamos tener conectividad.
En resumen, se trata solo de mantener ciertos buenos hábitos, consejos para que la batería del portátil tenga una vida más larga y nos preste un mejor servicio.