Si esta misma mañana hablábamos de como Intel ayer mismo utilizaba un evento como el Computex 2018 para adelantarse al resto de rivales en el mercado con un nuevo procesador, del que verdaderamente poco nos confirmaban, salvo que había sido dotado con 28 cores, capacidad para ejecutar 56 hilos a una velocidad base de 5 Ghz, algo que literalmente nos dejaba con la boca abierta, no hemos tenido que esperar demasiado para conocer la respuesta que AMD, y menuda respuesta.
Precisamente en la entrada que dedicábamos a Intel hablábamos de la respuesta que previsiblemente iba a dar AMD a Intel en no mucho tiempo y sobre todo en un dato que desconocíamos como puede ser el hecho de que, en su gama más alta, Intel vendiese sus procesadores a un precio de unos 1.999 dólares mientras que AMD hacía lo propio a 999 dólares. En esta nueva generación seguramente pasará algo muy similar, sobre todo si tenemos en cuenta que, tan sólo un día después, AMD ha puesto toda la carne en el asador.
AMD nos sorprende con la segunda generación de Threadripper, una gama de procesadores con hasta 32 núcleos de proceso y 64 hilos de ejecución
Entrando de lleno a hablar sobre el futuro en los procesadores que nos plantean desde AMD, comentarte que la nueva generación Threadripper, misma que llegará al mercado previsiblemente en otoño de este mismo año, curiosamente meses antes de que Intel lance también sus nuevos procesadores de gama alta, lo hará junto a una arquitectura que contará con nada menos que 32 núcleos de proceso y 64 hilos de ejecución que funcionarán a 3 Ghz, sin lugar a dudas toda una declaración de intenciones por parte de AMD, empresa que, después de muchos años, no dejará que Intel vuelva a ser la que fue hace no demasiado tiempo.
Tal y como ha anunciado la propia AMD, al parecer y para conseguir introducir tal cantidad de núcleos en un único procesador, sus ingenieros han tenido que hacer uso de las nuevas dies Zepplein con procesos litográficos de 12 nanómetros. Como detalle, comentarte que estas dies cuentan con ocho núcleos cada una, de esta forma los primeros Threadripper hacían uso de dos de estas dies para ofrecer ese máximo de 16 núcleos. Esta segunda generación de la gama de procesadores finalmente contará con cuatro dies, suficiente para dotarlos de hasta 32 núcleos.
A pesar de la potencia bruta que ofrece, la gama Threadripper también tiene sus inconvenientes
La parte negativa de esta nueva generación de procesadores de AMD la encontramos en el consumo energético que tienen los mismos. Para hacernos de una forma muy clara a la idea comentarte que, si ya el TDP de la primera generación de esta gama de chips pasaba de los 180 W, en esta segunda generación las necesidades en cuanto a energía de los mismos sube hasta unos nada despreciables 250 W, algo que debemos tener muy en cuenta, sobre todo si por motivos profesionales estamos interesados en instalar en nuestros servidores, uso al que estará dirigido mayoritariamente, un procesador de estas características técnicas.
Otra de las grandes limitaciones la encontramos en que el chipset X399 tan sólo soporta hasta cuatro canales de memoria por los ochos necesarios ahora. Debido a esto los dos nuevos canales que se activan ahora no tienen acceso directo a la memoria, algo que aumentará su latencia aunque, según AMD, esto no significa que se afecte al rendimiento. Precisamente al duplicar el número de núcleos y bajar sólo 2 nanómetros el tamaño estos procesadores ofrecen una frecuencia menor, al menos de momento, de 3’0 Ghz de base y 3’4 Ghz en modo Turbo, en este punto, debemos atender a AMD ya que indican que en las versiones finales esta frecuencia de funcionamiento podría llegar a ser mayor. En cuanto a la memoria cache, se espera que en la versión de 32 núcleos esta aumente hasta los 64 MB.