Más de una vez se ha hablado acerca de las nulas posibilidades de reflotar el Titanic, sin embargo, los especialistas coinciden siempre en que es una tarea prácticamente imposible. Y es que el agua del mar puede ser un elemento ferozmente destructivo en muchos aspectos. Por eso, queremos mostraros estas curiosas imágenes que dan fe del estado del Costa Concordia, el barco que permaneció sumergido parcialmente en la costa italiana durante tres años, para que podáis apreciar por vosotros mismos la magnitud de los destrozos que puede hacer en los materiales el hecho de estar sumergido en agua salada por algo más de mil días con sus respectivas noches.
Creo que es evidente el resultado, no se puede recuperar prácticamente ningún barco que haya sido sumergido determinado tiempo. Fue un fatídico 13 de enero de 2012 cuando el barco naufragó en la isla italiana de Giglio, todo debido a la temeridad de Francesco Schettino, que no tomó las precauciones debidas en cuanto a la profundidad, y acabó por encallar el barco, produciendo 32 muertos, casi un centenar de heridos y una movilización de 4.200 personas. El problema, es que el barco de 290 metros de eslora estuvo encallado un largo tiempo en la costa italiana, mientras los especialistas sopesaban como volverlo a poner en ruta sin causar demasiadas pérdidas.
https://www.youtube.com/watch?v=MTMAPLkypqY
Un fabuloso vídeo. Los materiales metálicos están completamente oxidados, como no podía ser de otro modo. De igual forma, la madera ha sufrido constantes daños, aunque quizás se mantiene más entera de lo que podíamos imaginar. Son los materiales plásticos y acrisolados quienes han sobrevivido mejor en la parte sumergida del barco. Un paisaje post-apocalíptico que dilatará la pupila de los más curiosos y que hoy hemos querido traerte a Actualidad Gadget para que puedas echarle