Si tu portátil tiene una webcam que da pena o tu sobremesa ni siquiera tiene cámara, convertir el móvil en cámara para el PC es un salvavidas. Windows 11 ya permite usar cualquier Android como webcam de forma nativa y hasta sin cables, así que puedes mejorar tu imagen en videollamadas en un rato y sin gastar dinero.
La gracia es que no necesitas programas raros si cumples requisitos básicos y sigues la ruta correcta en la configuración. Con Enlace Móvil en Windows y la app Enlace a Windows en el teléfono, tu cámara trasera (o la frontal) se convierte en una “Cámara de Windows Virtual” lista para Zoom, Meet, Teams o la app Cámara, con opciones para cambiar de sensor, pausar vídeo y aprovechar efectos del propio móvil.
Qué es la cámara conectada de Windows 11 y por qué merece la pena
Microsoft ha incorporado a Windows 11 una función en pruebas (ya muy extendida) que permite que el sistema “vea” tu móvil Android como una webcam del propio PC. La conexión es inalámbrica, va fina, con poco retardo y ofrece más calidad que muchas cámaras integradas.
La experiencia se integra con Enlace Móvil (antes “Tu Teléfono”), pero la cámara no se activa desde esa app, sino desde los ajustes del sistema. El resultado aparece como “Cámara de Windows Virtual” en tus programas de videollamada, por lo que solo tendrás que seleccionarla en las preferencias de vídeo de cada aplicación.
Además de la imagen, la plataforma aprovecha la capa del fabricante del móvil: puedes cambiar entre cámara frontal y trasera y pausar la transmisión desde la pantalla del teléfono. Algunos modelos aplican filtros y efectos propios del software del dispositivo.
La mayor ventaja práctica es la libertad de colocación. Al no exigir cable, puedes poner el móvil en el trípode o soporte que quieras y encuadrar como un pro, manteniendo tu portátil donde te resulte más cómodo.
Para rematar, si ya usas Enlace Móvil, ganarás otras comodidades: ver notificaciones, responder SMS, gestionar fotos o abrir aplicaciones Android en Windows, todo en el mismo entorno.
Requisitos y compatibilidad: lo que necesitas antes de empezar
La función de cámara conectada llegó primero a los canales Insider de Windows 11 y se ha ido desplegando de forma gradual. Si tu equipo está actualizado, lo normal es que ya la tengas, pero conviene comprobar versión de Windows y de las apps implicadas.
- PC con Windows 11. La función se introdujo para Insiders (Build 22635.3212) y se apoya en el componente Cross Device Experience Host, que se actualiza desde Microsoft Store.
- Móvil Android con Android 9.0 o superior. Para mejor compatibilidad, se recomienda Android 10+.
- Enlace Móvil en Windows actualizado. Asegúrate de que recibe las últimas actualizaciones desde Microsoft Store.
- Enlace a Windows en el móvil en versión reciente. Recomendable la versión 1.24012 o superior y, si puedes, apuntarte a la beta en Google Play para ir a la última.
- Bluetooth activado en PC y móvil, y preferiblemente ambos en la misma red Wi‑Fi para una experiencia estable.
Si aún usas Windows 10, esta función concreta no está disponible. Puedes actualizar a Windows 11 (incluso en equipos no compatibles, bajo tu responsabilidad) o, si no te cuadra, tirar de alternativas de terceros como verás más abajo.
Preparar el móvil Android: Enlace a Windows y cuenta de Microsoft
En muchos teléfonos (OnePlus, Samsung, HONOR, OPPO, ASUS, vivo…) Enlace a Windows viene preinstalada. Si no la ves, descárgala desde Google Play. Para tener lo último de lo último, apúntate al programa beta en Google Play y actualiza.
Abre la aplicación en el móvil y inicia sesión con la misma cuenta de Microsoft que uses en tu PC. Este detalle es clave para que ambos dispositivos se “reconozcan” sin fricciones.
El emparejamiento se realiza escaneando un QR que verás en el PC. Si tu app no muestra lector de QR integrado, usa la cámara del móvil o herramientas como Google Lens para abrir el enlace que apunta al proceso de vinculación.
Durante el primer arranque te pedirá permisos. Acéptalos todos si quieres disfrutar de fotos, notificaciones, llamadas y demás. En Android 13+, el permiso de notificaciones es obligatorio para sincronizar avisos entre dispositivos.
Cuando termine la vinculación, ya verás en Windows tus mensajes, llamadas, fotos y hasta podrás abrir apps del móvil en ventanas. Que no cunda el pánico si aún no aparece nada de la webcam: esa palanca se enciende en los ajustes del sistema.
Configurar Windows 11: dónde activar “Usar el móvil como cámara conectada”
Con el móvil listo, toca darle permiso al PC para acceder al dispositivo. Entra en Configuración (Win + I) > Bluetooth y dispositivos > Dispositivos móviles.
Activa la opción “Permitir que este equipo acceda a sus dispositivos móviles” y pulsa en “Administrar dispositivos”. Debería aparecer tu teléfono en “Mis dispositivos”.
Dentro de ese dispositivo, enciende la palanca “Usar el móvil como cámara conectada”. Si ves otro conmutador para fotos o notificaciones, puedes habilitarlo también para ampliar funciones.
En segundo plano, Windows actualiza el componente Cross Device Experience Host desde Microsoft Store. Si algo no cuadra, abre la Store y verifica que no haya actualizaciones pendientes.
Desde este momento, el sistema expone una nueva cámara al resto de programas. Se llama “Cámara de Windows Virtual” y es la que debes elegir en Zoom, Teams, Meet, OBS o en la app Cámara del propio Windows.
Ponla en marcha: selección en tus apps y controles en pantalla
Abre tu aplicación de videollamada preferida y entra en su configuración de vídeo. Selecciona “Cámara de Windows Virtual” como dispositivo. En la app Cámara del sistema, puedes conmutar con el icono de cambio de cámara si hay más disponibles.
La primera vez que la elijas, Windows te pedirá que desbloquees el móvil. En la pantalla del teléfono verás botones para alternar entre cámara frontal/trasera y para pausar el vídeo. Algunos móviles permiten activar efectos propios (desenfoque, belleza, HDR, etc.).
En pruebas reales, la experiencia va muy fluida. El retardo es bajo, la imagen es nítida y la flexibilidad de colocación marca la diferencia, sobre todo al poder usar la cámara trasera, mucho mejor que la del portátil medio.
No te olvides del audio. Aunque la función está centrada en la cámara, puedes seguir usando el micrófono del PC o aprovechar el array de micrófonos del móvil si tu aplicación lo permite. Elige la fuente de audio en la configuración de la app.
Si tu PC ya tenía webcam, verifica que la app no vuelva sola a la anterior. Deja fijada “Cámara de Windows Virtual” como predeterminada dentro de cada programa para evitar sustos antes de una reunión.
Alternativas si no te aparece la opción nativa
Puede que aún no te haya llegado la función o que uses Windows 10. Tranquilidad, tienes dos vías que funcionan bien. La primera, el modo Webcam por USB que incluyen algunos Android; la segunda, una app de terceros como DroidCam.
En algunos móviles, al conectar el USB al PC puedes elegir el tipo de conexión. Si ves “Administrar” y luego “Webcam” como modo USB, selecciónalo. A continuación, abre la app Cámara en Windows y usa el icono de cambio de cámara para conmutar al teléfono.
La otra opción clásica es DroidCam, disponible gratis en Google Play y Microsoft Store. Instálala en el móvil y en el PC, abre la app en Android para ver la IP de tu Wi‑Fi y cópiala en el cliente de Windows. Marca las casillas de vídeo y audio y pulsa Start/Iniciar.
Para que funcione por Wi‑Fi, ambos deben estar en la misma red inalámbrica. Si quieres máxima estabilidad, puedes usar un cable USB con el modo depuración configurado según indique la app.
Estas soluciones no están tan integradas como la de Windows 11, pero te sacan del apuro y ofrecen buena calidad si ajustas bien la iluminación y el encuadre.
Consejos de calidad: saca partido a la cámara del móvil
La cámara trasera suele ser bastante mejor que la frontal. Si puedes, usa la trasera y activa el enfoque continuo para mantenerte nítido. Un pequeño trípode o un soporte estable marcan la diferencia.
La luz es la reina. Coloca una fuente de luz frontal suave (una ventana o una lámpara difusa) y evita contraluces. Con buena iluminación, incluso móviles modestos se ven espectaculares.
En lo inalámbrico, prioriza la banda de 5 GHz del Wi‑Fi y sitúa el móvil cerca del router si puedes. Así evitas microcortes y mantienes baja la latencia durante las reuniones.
Cuida la batería. Revisa el indicador de batería en la pantalla de control y, si la reunión es larga, conecta el móvil a corriente. Evitarás que se corte a mitad de una sesión importante.
Para el audio, si no usas un micrófono dedicado, unos auriculares con micrófono o el propio smartphone como entrada pueden mejorar bastante la voz. Verifica niveles y cancelación de ruido en tu app.
Errores típicos y cómo resolverlos
Actualización de Windows que no entra, palancas que no se aparecen, QR que no se deja… nada que no se solucione con orden. Lo primero: Windows Update y Microsoft Store al día, en el PC, y Enlace a Windows actualizado (mejor en beta) en el móvil.
En su lanzamiento, la función exigía ser Insider (Build 22635.3212). Si vas justo de versión, apúntate al canal Insider que prefieras y fuerza la actualización desde Windows Update. Si falla la descarga, a veces reinstalar sobre la misma versión desbloquea el proceso.
La webcam no se activa desde la app Enlace Móvil. Recuerda: hay que ir a Configuración > Bluetooth y dispositivos > Dispositivos móviles > Administrar dispositivos y activar “Usar el móvil como cámara conectada”. Sin esa palanca, no aparece la “Cámara de Windows Virtual”.
El QR no se abre en el móvil. Usa la cámara del teléfono o un lector como Google Lens para escanear y abrir el enlace. Debes entrar con la misma cuenta Microsoft en ambos dispositivos.
No aparece la cámara en la app de videollamadas. Entra en los ajustes de vídeo de la aplicación y elige “Cámara de Windows Virtual”. Si hay varias cámaras, desactiva las que no uses en el programa para evitar que cambie sola.
¿iPhone? Por las restricciones de iOS, Enlace Móvil con iPhone es muy limitado y esta función de cámara no está disponible. La solución aquí pasa por apps de terceros compatibles con iOS.
Más allá de la cámara: lo que aporta Enlace Móvil
Una vez vinculado el teléfono, Enlace Móvil te permite ver y responder mensajes, gestionar notificaciones, hacer y recibir llamadas, ver fotos recientes y, en muchos modelos Android, abrir tus apps en ventanas del escritorio.
Desde la configuración de Enlace Móvil en Windows puedes decidir qué sincroniza. Activa o desactiva notificaciones, fotos, mensajes, llamadas y más, y elige la carpeta donde guardar archivos recibidos.
Si te preocupa la privacidad, los permisos en Android controlan qué puede hacer Enlace a Windows. Puedes revocar el acceso a fotos o a notificaciones cuando quieras desde los ajustes del teléfono.
Esto convierte al móvil en un aliado mientras trabajas en el PC. Responder un mensaje, arrastrar una foto o atender una llamada sin tocar el teléfono ahorra tiempo y te mantiene concentrado.
Cuándo usar cable, cuándo ir sin cables y otros detalles clave
La opción nativa de Windows 11 se luce sin cable, pero si el Wi‑Fi de tu entorno es inestable, un USB puede darte la fiabilidad que necesitas. Algunas apps de terceros permiten conmutar entre Wi‑Fi y USB según convenga.
Si vas a usar el móvil durante horas, piensa en el calor. Quita la funda, coloca el teléfono en un sitio ventilado y baja el brillo si no necesitas mirar la pantalla constantemente.
La palanca de “cámara conectada” convive con otras funciones útiles. También puedes activar notificaciones de fotos nuevas, copiar/pegar entre dispositivos y la zona Wi‑Fi instantánea en los modelos compatibles, lo que redondea la experiencia entre dispositivos.
Y sí, algunos fabricantes (como Google en ciertos Pixel) han ido añadiendo modos webcam vía USB. Si tienes esa opción en el menú de USB del teléfono, pruébala: es enchufar, elegir “Webcam” y listo.
Todo esto se traduce en que hoy puedes tener una imagen de nivel con lo que ya tienes en el bolsillo. Con dos ajustes bien puestos, tu móvil pasa de ser “solo un móvil” a la mejor webcam de tu equipo para trabajar, estudiar o hacer streaming ligero.
Sin necesidad de gastar en hardware extra y con la libertad de moverte por la sala, la combinación de Windows 11 y un Android moderno ofrece calidad, estabilidad y control. Si a eso le sumas buena luz y un soporte decente, el salto de calidad es evidente.
Quien venga de una webcam integrada de portátil notará el cambio desde el primer minuto: menos ruido, mejor color y más nitidez, con un retardo mínimo y controles rápidos en la pantalla del teléfono.
Con todo lo anterior en mente, la receta es clara: actualiza Windows y las apps, vincula tu Android, activa la cámara conectada, selecciona “Cámara de Windows Virtual” en tus programas y cuida la iluminación. Obtener resultados profesionales en cuestión de minutos sin gastarte un euro es totalmente factible.
