Google Chrome es uno de los navegadores web más populares y usados de cuantos están disponibles en el mercado, que no son precisamente pocos. Este software desarrollado por Google ofrece al usuario una gran cantidad de opciones y funciones muy interesantes, aunque requiere que cada cierto tiempo realicemos un “mantenimiento general” del mismo para que este no se ralentice en gran medida y convierta nuestros paseos por la red de redes en un auténtico suplicio.
Tanto como si usas un Google Chrome que va muy lento como si no, hoy queremos ofrecerte este artículo en el que te vamos a mostrar 6 sencillos consejos para hacer que el navegador web de Google funcione a toda velocidad y sin que sea un quebradero de cabeza.
Como suelo decir en muchas ocasiones, consigue un lápiz y papel o bien un dispositivo donde puedas tomar notas porque casi con total seguridad te va a ser necesario para apuntar toda la interesante información que vas a leer a continuación.
Elimina extensiones que no uses
Uno de los principales motivos por los que Google Chorme se ralentiza en exceso es debido a la enorme cantidad de cosas que vamos instalando. Es normal instalar alguna extensión o que algunos programas que instalamos añadan algún plugin, pero lo que no debe de ser normal es que tengamos instaladas por ejemplo más de una veintena de 20 extensiones.
Haz un repaso por todos los añadidos que le has instalado a tu navegador web y elimina todas aquellas que no usas, para intentar déjalo lo más cercano posible al punto original de instalación de Google Chrome. A buen seguro en poco tiempo comenzarás a notar como puedes navegar y trabajar de una forma mucho más rápida.
Para acceder a las extensiones que tienes instaladas sólo deberás de entrar a las opciones de Chrome y seleccionar la opción «Mas herramientas». Ahí encontrarás la opción para comprobar que extensiones tienes instaladas y además encontrarás también la posibilidad de eliminaras o desactivarlas.
Para deshabilitar una extensión bastará con que desmarques la casilla correspondiente. Para eliminarla sólo tienes que pulsa el icono de la papelera que aparecer junto a ella.
Elimina plugins que no son necesarios
Los plugins son instalados en la mayoría de las ocasiones por programas, sin que en muchas ocasiones te enteres, y que permiten usar determinadas funciones del navegador, consumiendo por supuesto recursos.
Para comprobar los plugins que tienes instalados en tu ordenador bastará con que abras una nueva pestaña del navegador y escribas Chrome://plugins. A partir de aquí podrás localizar los programas que no usas y deshabilitar por tanto esos plugins que tan sólo te están “molestando”
Eso sí, ten mucho cuidado con lo que eliminas o inhabilitas no vaya a ser que a los pocos minutos te puedas arrepentir.
Elimina el rastro que vas dejando
Google Chrome va guardando a cada momento una completa lista de todos los sitios que vas visitando por si en un momento determinado necesitas volver a visitar uno de esos sitios. Esto es lo que se conoce como historial, que puede ser muy útil en determinados casos, pero que puede llegar a ralentizar tu navegador en gran medida.
Cada cierto tiempo es muy recomendable borrar estos datos de navegación. Para ello deberás de ir a las opciones de Google Chrome y seleccionar la opción “Más herramientas” y ahí escoger la opción “Borrar datos de navegación”. Podrás borrar los datos que quieras escogiendo el período de tiempo, aunque lo mejor es que los borres todos, escogiendo eso si las opciones correctas. Por ejemplo no deberías de borrar las contraseñas guardadas ya que puede ser algo tremendamente útil.
Evita el malware o spyware en tu navegador
Otro de los aspectos que puede afectar al rendimiento de Google Chrome, es de carácter externo y se trata del tan odiado y temido malware o spyware. Para detectar si tienes algún contenido de este tipo instalado puedes verlo si un buen día tu página de inicio habitual ha cambiado o si ha aparecido una extraña barra de herramientas ha aparecido como por arte de magia (existen muchos más ejemplos, pero estos suelen ser los dos más habituales).
Ante la cada vez mayor presencia de este contenido que se instala en Google Chrome, Google por fin ha decidido tomar cartas en el asunto y ha lanzando una nueva herramienta para detectar este software malicioso que puedes descargar ya mismo y de forma totalmente gratuita desde este enlace.
La sencillez es la bandera de esta herramienta que no necesita instalación y que en tan sólo unos segundos se incidirá indicándote el resultado del análisis y permitiéndote restablecer la configuración de tu navegador web para devolver al punto inicial cuando funciona a la perfección.
Lo más curioso de todo es que una vez que termines de utilizar esta herramienta de Google se autodestruirá no dejando ningún rastro ni en tu ordenador ni en tu navegador web.
Analiza tu equipo
Otra buena opción, además de usar la herramienta de Google que acabamos de ver es la de analizar nuestro equipo con alguna herramienta que detecte la presencia en el mismo de malware, y que puede ser uno de los causantes de la ralentización de Google Chrome.
Existen cientos de aplicaciones de este tipo, pero en este artículo te hemos dejado unas cuantas para que las pruebas y elijas la que más se ajusta a tus necesidades. Si con alguno de los consejos que hemos expuesto arriba no se han solucionado los problemas en el navegador de Google prueba analizando tu equipo, porque casi con total seguridad te encontrarás alguna desagradable sorpresa.
Mantén Google Chrome siempre actualizado
Google actualiza cada cierto tiempo su navegador web y a pesar de que puede parecer una pérdida de tiempo estar actualizando cada poco tiempo Google Chrome es imprescindible que instales todas las actualizaciones que se vayan lanzando ya que en ellas se implementan diferentes mejoras que pueden resultar muy positivas de cara a la rapidez de navegación y de uso.
Para saber si tienes la última versión de Google Chrome instalada tan sólo tienes que acceder a la configuración y acceder a la opción de información, donde podremos conocer la versión que tenemos instalada y además si es necesario actualizarla.
Esperamos que con estos consejos hayas conseguido solucionar tus problemas con Google Chrome y recuperar la normalidad en tu navegador web.
¿Conoces algún consejo más con el que mejorar la velocidad y el rendimiento general de Google Chrome?.