
La piraterĂa del fĂștbol vuelve a estar en el centro del debate en España. El director ejecutivo de Movistar Plus+, Daniel DomenjĂł, sostiene que casi la mitad del pĂșblico que sigue los partidos recurre a vĂas no autorizadas; en concreto, ha cifrado en el 43% a quienes incurren en estas prĂĄcticas, una proporciĂłn que ilustra la dimensiĂłn del problema.
En un coloquio celebrado en el CĂrculo Ecuestre de Barcelona y moderado por el periodista MĂ rius Carol, DomenjĂł lamentĂł que socialmente no se perciba como algo reprobable y que, en el ĂĄmbito institucional, no se estĂ© actuando con la contundencia que corresponderĂa. A su juicio, si no se encuentra una soluciĂłn, el modelo de derechos deportivos afrontarĂĄ años complejos, con riesgo de pĂ©rdida de competiciones y una oferta mĂĄs limitada para el espectador.
Una cifra que inquieta al sector
El directivo describiĂł un contexto en el que la tolerancia social hacia el acceso ilĂcito es alta y el daño econĂłmico, tangible. Para Ă©l, la normalizaciĂłn de la piraterĂa estĂĄ erosionando el valor del fĂștbol de pago y obliga a repensar cĂłmo se distribuyen y protegen estos contenidos.
Apuesta por la innovaciĂłn frente a la piraterĂa
Entre las vĂas de respuesta, DomenjĂł señalĂł la necesidad de poner en manos del pĂșblico un servicio claramente superior al que ofrecen las emisiones ilegales. SegĂșn explicĂł, ser mĂĄs disruptivos en tecnologĂa y en experiencia de usuario puede desincentivar a muchos, acercando al aficionado a plataformas legales.
El responsable de Movistar Plus+ avanzĂł que trabajan en funcionalidades que acerquen la retransmisiĂłn al estadio con nuevas perspectivas y recursos interactivos, con el objetivo de que el partido se viva de formas hoy poco imaginables. La ambiciĂłn es que la propuesta oficial resulte mĂĄs atractiva que cualquier atajo pirata.
El coste de los derechos y las negociaciones
El fenómeno se produce, ademås, en un momento de hiperinflación del precio de los derechos deportivos. Domenjó describió las negociaciones como un åmbito con reglas propias y confirmó que Telefónica mantiene conversaciones para asegurarse varias competiciones, como la Champions, comprometiéndose a compartir novedades cuando sea posible.
MĂĄs contenidos y formatos a medida
Para rentabilizar mejor esas inversiones, la compañĂa quiere ser mĂĄs flexible y generar piezas vinculadas al deporte que amplĂen el interĂ©s mĂĄs allĂĄ del directo. En palabras del CEO, estĂĄ bien aspirar a ser el llamado Estadio infinito, pero tambiĂ©n hace falta crear contenidos complementarios que atraigan y fidelicen.
Esa estrategia incluye formatos a medida en torno a grandes deportistas, aprovechando su tirĂłn como referentes sociales incluso tras su retirada. DomenjĂł citĂł ejemplos como Rafa Nadal o Pau Gasol, y defendiĂł la continuidad narrativa de esos nombres en pantalla para conectar con nuevas audiencias.
Dependencia del deporte y demanda de medidas legales
MĂĄs de la mitad de los clientes de la plataforma se dieron de alta por la oferta deportiva, un dato que, segĂșn el directivo, evidencia el grado de dependencia del negocio respecto a estos contenidos. Por ello, insistiĂł en que resulta necesario tramitar una ley que proteja con mayor eficacia los derechos y alinee a las grandes partes implicadas.
El cuadro que dibuja DomenjĂł combina una amenaza clara âun 43% que recurre a vĂas ilĂcitasâ con un plan de acciĂłn basado en innovaciĂłn, mayor flexibilidad editorial y apoyo normativo. Entre tanto, continĂșan las conversaciones para asegurar competiciones clave, con la vista puesta en ofrecer una experiencia que compita de tĂș a tĂș con la piraterĂa y devuelva equilibrio al mercado.