Apple ha publicado la segunda beta de iOS 26.1 apenas un par de semanas después de la primera, una iteración centrada en afinar el sistema y en revisar decisiones recientes. Más allá de la estabilidad, la compañía introduce cambios tangibles en la experiencia diaria que abordan críticas de los usuarios sin estridencias.
La compilación está disponible para desarrolladores registrados desde primeras horas de la semana y no debería tardar demasiado la llegada de la beta pública. Si no tienes prisa, lo más sensato es esperar a esa versión o a la edición final prevista para finales de octubre, evitando sorpresas en tu iPhone principal.
La alarma del iPhone cambia: adiós a los apagados por error
El rediseño de la alarma que debutó con iOS 26 generó confusiones por mostrar dos botones casi idénticos para posponer o detener. En iOS 26.1 Beta 2, Apple reemplaza el botón de apagar por un deslizador para detener, un gesto más deliberado que reduce la posibilidad de silenciar el despertador sin querer.
Esta decisión no solo mejora la usabilidad; también apela a la memoria colectiva del iPhone con un guiño al clásico “deslizar para desbloquear”. Quien desee posponer la alarma puede seguir tocando la pantalla, pero para apagarla habrá que realizar un movimiento consciente, justo lo que muchos pedían.
Ajustes visuales e interfaz más coherente
La beta reorganiza sutilmente la interfaz: en Ajustes, los encabezados de secciones aparecen alineados a la izquierda, igual que los nombres de las carpetas cuando las abres en la pantalla de inicio. Son cambios pequeños, pero ayudan a que todo se vea más limpio y consistente.
También hay novedades con el lenguaje visual Liquid Glass. El efecto se percibe más contenido en áreas clave y se extiende a más rincones del sistema, incluida la app TestFlight y elementos como el teclado numérico del Teléfono o el reloj de la pantalla bloqueada. Si te resulta recargado, puedes atenuarlo desde Ajustes > Accesibilidad > Pantalla y tamaño del texto, activando Reducir transparencia para priorizar la legibilidad.
Apps y opciones del sistema: más control y personalización
La app Fitness da un paso adelante con la posibilidad de crear entrenamientos personalizados desde cero: eliges tipo de actividad, duración, calorías activas estimadas, nivel de esfuerzo e incluso la hora de inicio, ideal para quienes registran rutinas a medida.
En Privacidad y seguridad aparece una opción de seguridad en segundo plano que automatiza descargas e instalaciones de parches, sustituyendo al sistema de respuestas rápidas e integrando la protección en el ciclo habitual de actualizaciones.
Apple toca además detalles de accesibilidad y menús: la antigua función Formas de botón se reconvierte en “Mostrar bordes”, y en Fotos, accesos como Favorito, Reproducir como presentación u Ocultar se reposicionan en la parte superior del menú para una interacción más directa.
Rendimiento, estabilidad y calendario de lanzamiento
Quienes ya la han probado hablan de animaciones más fluidas, menos cierres inesperados y un comportamiento general más consistente que en la primera beta. Es el típico ciclo “.1”: menos foco en grandes titulares y más en pulir lo que tocas a diario.
La beta 2 está disponible para cuentas de desarrollador desde Ajustes > General > Actualización de software. La beta pública debería activarse en los próximos días y la versión definitiva apunta a finales de mes, posiblemente alrededor del día 27, si se mantiene el ritmo. Si usas el iPhone como herramienta principal, conviene esperar a la estable para evitar problemas innecesarios.
Con esta entrega Apple corrige un tropiezo en la alarma, retoca la coherencia visual de iOS y suma pequeñas mejoras que, en conjunto, hacen que el sistema se note más redondo; no cambia la manera de usar el iPhone, pero sí elimina fricciones y deja el terreno listo para la llegada de la versión final.