La próxima generación del iPhone, independientemente de como se denomine al final, tiene que ser un punto de inflexión para los chicos de Cupertino, los cuales están sometidos a muchísima presión por parte de los usuarios y analistas, ya que se celebra el décimo aniversario del iPhone, un aniversario que nos debería presentar un iPhone que debería volver a asombrar a como lo hacía la compañía hace unos años. De momento y cuando todavía faltan algo menos de 9 meses para que se presente de forma oficial, los rumores relacionados con este dispositivo vuelven a hacer acto de presencia, y nuevamente provienen de la publicación asiática DigiTimes.
Según esta publicación, el nuevo iPhone tendrá un bisel fabricado en acero, dejando de lado el aluminio, ya que tanto en la parte delantera como trasera del mismo, la compañía con sede en Cupertino haría uso del cristal. Estéticamente el dispositivo puede ser espectacular, pero ante las caídas es uno de los componentes más frágiles que podemos encontrar en la fabricación de un smartphone. DigiTimes se basa en fuentes relacionadas con los proveedores de componentes de la parte exterior del iPhone, ya que según afirma la publicación, no se realizarán pedidos de aluminio para fabricar el dispositivo.
Los últimos rumores relacionados con el iPhone, afirman que Apple podría lanzar la renovación de los modelos de 4,7 y 5,5 pulgadas sin grandes cambios estéticos (algo que no gustará a muchos usuarios) y una versión especial con pantalla sin bordes laterales, similar al S7 Edge de la compañía coreana Samsung. Este modelo especial debería ser el dispositivo espectacular que todos los usuarios de Apple están esperando y debería diferenciarse bastante del modelo actual, iPhone 7 y iPhone 7 Plus modelos que no están teniendo tanto éxito como sus predecesores, el iPhone 6 y 6 Plus y el iPhone 6s y 6s Plus.
Y esa será una escusa para valer 1000 euros más todavía xD