No corren buenos tiempos para la compañía taiwanesa que parece inmersa en un pozo sin fondo. Desde hace unos años que la compañía no tiene el mismo protagonismo que el resto de marcas en el sector móvil y eso que durante muchos años fueron los primeros del ranking a nivel mundial, pero ahora están inmersos en una denigrante crisis existencial.
Desde hace más de un año que la compañía suprimió varias de sus sedes en distintos países y ahora la compañía se quedará sin su máximo representante, Chialin Chang abandona después de seis años la firma. Esto se debería a una decisión personal, pero tampoco hay nada confirmado oficialmente sobre su marcha.
Con el Mobile World Congress como fecha más cercana a un evento en el que asistirá la compañía, intentaremos obtener información al respecto sobre el rumbo de la marca para los próximos años y es que a pesar de todo HTC sigue luchando por mantenerse entre las empresas actuales. La reciente compra realizada en manos de Google con la división «Powered by HTC» y las ventas conseguidas por el modelo de Pixel de la compañía, hacen que se mantenga con vida, pero evidentemente es una agonía más lenta.
Es cierto que la división de realidad virtual con las HTC Vive, sigue al frente en la pelea por esta parte del mercado y también es cierto que de momento se pueden ver algunos lanzamientos de dispositivos móviles, pero ya nada es como antes y HTC está tocada de muerte en este sector de la telefonía. Ahora con la marcha de Chang, la presidenta y directora ejecutiva, Cher Wang se pondrá a las riendas de la firma hasta que se encuentre un sucesor, algo que tampoco parece posible con la situación actual de la marca. Seguramente al final se quedarán como empresa de desarrollo de IA y VR para dejar de lado el tema de los smartphones, pensar que la deuda acumulada por HTC superaba los 100 millones de dólares en el tercer trimestre del año 2017, con estas cifras es poco posible que aguante mucho tiempo más.