Las explosions del Samsung Galaxy Note 7 no están dejando indiferentes a nadie, hasta tal punto que varias compañías aéreas han comenzado a vetar estos dispositivos en sus vuelos. Son por ahora tres a las que no dudamos que se sumarán muchas a lo largo de la semana. Samsung confirmó oficialmente el fallo de fabricación que hacía explotar el Samsung Galaxy Note 7 mientras se cargaba (o no), de forma inesperada. En lugares delicados como los aviones deben maximizarse las precauciones, más cuando las condiciones de vuelo pueden afectar seriamente a la volatilidad de estos dispositivos. Por otro lado, no son los primeros que son vetados, ya pasó en su día con los hoverboard.
Así es, casi todas las compañías de Estados Unidos de América prohibieron terminantemente los hoverboards en los vuelos, lo que causó bastante malestar entre algunos viajeros, algunos incluso famosos. Pues el Samsung Galaxy Note 7 ha sido puesto en la misma lista negra por Qantas, Jeststar y Virgin Australia, las tres primeras compañías aéreas que han decidido prohibir hasta cierto límite estos dispositivos.
Se estima que el desvarío de las baterías le va a costar a Samsung alrededor de 1.000 millones de dólares, mientras tanto, sigue con su lucha encarnizada por solicitar la devolución de los posibles dispositivos afectados para sustituirlos por dispositivos con garantías de no explotar.
Debemos recalcar que no se prohíbe el embarque del dispositivo, sino que deberán embarcar apagados y no podrá conectarse vía USB a ningún sistema de entretenimiento o carga dentro del avión. Podrás llevar tu Samsung Galaxy Note 7 tranquilamente en el bolsillo. Según la FAA lo más probable es que todas las compañías aéreas de Estados Unidos de América también tomen las mismas precauciones en sus vuelos. Puede volverse excesivamente mediático y serio si un dispositivo de estas características explotara y causara el caos en pleno vuelo.