Logitec Signature Slim Solar K980, perfecto para trabajar sin límites de autonomía [Review]

Vivimos rodeados de cables, cargadores y pequeñas dependencias tecnológicas que nos recuerdan lo efímero de la batería. Logitech, con su nueva propuesta, parece querer romper esa inercia. El Signature Slim Solar+ K980 nace con una premisa tan simple como poderosa: un teclado que se alimenta de la luz, que trabaja sin pedir nada y que promete convertir el escritorio en un espacio un poco más libre.

Logitech no ha pretendido reinventar el teclado, sino refinar la experiencia cotidiana de escribir. Este modelo apunta directamente al entorno profesional, a quienes viven entre hojas de cálculo y reuniones virtuales, pero sin renunciar al placer de una buena pulsación. El resultado es un dispositivo que no sorprende a primera vista, pero que conquista en silencio, tecla a tecla.

Diseño y materiales

A primera vista, el K980 mantiene la línea estética de la familia Signature: sobrio, elegante y con ese equilibrio entre modernidad y minimalismo que Logitech domina tan bien. Su cuerpo combina aluminio con plásticos reciclados, logrando un aspecto sólido y un tacto agradable. No hay estridencias ni luces innecesarias, sólo la sensación de un producto bien construido, pensado para durar más que las modas.

El formato es delgado y ligero (apenas 700 gramos), pero ofrece una base firme sobre el escritorio. Cada tecla está perfectamente alineada en una cuadrícula que transmite orden visual, y el conjunto se siente premium sin intentar parecerlo. No brilla, pero tiene carácter. Logitech demuestra aquí que el diseño no necesita gritar para ser elegante.

Autonomía infinita

El rasgo más llamativo del K980 está, literalmente, en su superficie. En la parte superior, un panel solar discreto convierte la luz ambiental (tanto natural, como artificial) en energía suficiente para mantener el teclado encendido durante meses. En condiciones normales de oficina, basta la iluminación de una lámpara para asegurar una autonomía casi indefinida.

La ausencia de puerto de carga no es un descuido, sino una declaración de principios. Logitech quiere que te olvides del cable, de los avisos de batería baja y del ritual de conectar el teclado cada cierto tiempo. Según la marca, en completa oscuridad puede mantenerse activo hasta cuatro meses, y en la práctica, esa promesa se cumple. Es, probablemente, el teclado más autosuficiente que ha pasado por nuestras manos.

Escribiendo con este teclado

El K980 ofrece una escritura precisa, cómoda y silenciosa. Las teclas de perfil bajo, con mecanismo de tijera, recuerdan a las de los portátiles de gama alta. La pulsación es corta pero firme, con un punto de resistencia bien medido. No es un teclado mecánico, ni lo pretende: su virtud está en la suavidad, en esa sensación de control que permite escribir durante horas sin fatiga.

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En el día a día, escribir con él resulta casi terapéutico. No hay clics metálicos ni vibraciones, sólo una cadencia suave que invita a concentrarse. La ausencia de retroiluminación puede parecer un sacrificio, pero responde a una lógica clara: maximizar la autonomía y simplificar el diseño. Si tu espacio de trabajo tiene buena luz (y si no la tiene, este teclado no es para ti), no la echarás de menos.

Conectividad y versatilidad

Uno de los puntos fuertes del K980 es su capacidad para integrarse en diferentes entornos. Gracias al sistema Easy-Switch, permite conectar hasta tres dispositivos simultáneamente y alternar entre ellos con una simple pulsación. Pasar del ordenador al tablet o al smartphone es tan rápido que casi se siente mágico.

La compatibilidad es otro de sus valores seguros. Funciona con Windows, macOS, ChromeOS, Linux, iPadOS y Android, y puede usarse tanto por Bluetooth Low Energy como con el receptor Logi Bolt, una opción más estable y segura en entornos de oficina. En un escenario profesional, donde las interferencias y la fiabilidad son críticas, esta doble vía es una ventaja que se agradece.

Funciones profesionales

El K980 incluye algunas teclas de función especialmente pensadas para la productividad moderna. Controles de videollamada (silenciar micrófono, encender o apagar cámara) y una tecla dedicada a la inteligencia artificial, que en los próximos meses se integrará con herramientas corporativas. Logitech sabe que el trabajo híbrido ha cambiado nuestras rutinas, y este teclado está diseñado con esa nueva realidad en mente.

Además, es compatible con las aplicaciones Logi Options+ y Logi Tune, que permiten personalizar funciones, reasignar teclas y crear atajos. Sin embargo, el K980 no pretende ser un teclado programable ni un accesorio para gamers. Su territorio natural es la oficina, y ahí brilla con luz propia (nunca mejor dicho).

Sostenibilidad por bandera

Más allá de lo técnico, hay un mensaje ambiental en este teclado. Logitech lleva años apostando por materiales reciclados y procesos de baja huella de carbono, y el K980 es uno de los mejores ejemplos de ello. Su estructura incorpora plásticos postconsumo y aluminio con certificación sostenible. No es un gesto cosmético, sino una política real que se percibe en cada nuevo lanzamiento de la marca.

La idea de un teclado que se alimenta de la luz y está hecho con materiales responsables tiene una carga simbólica evidente: tecnología que no sólo facilita, sino que también respeta. En un mercado que produce más rápido de lo que repara, esta filosofía se agradece.

Experiencia de uso y comparativa con el Craft

Si lo comparamos con el Logitech Craft, el K980 renuncia al lujo del dial multifunción y a la retroiluminación inteligente, pero gana en simplicidad y autonomía. El Craft era un teclado de artista; el K980 es un compañero de batalla. Menos vistoso, pero más libre. Mientras el primero pedía atención, el segundo se olvida sobre la mesa, cumpliendo su papel con discreción suiza.

Tras varios días de uso, su mayor virtud es precisamente esa: no necesitar pensar en él. Funciona, se conecta, y sigue adelante sin interrupciones. En una época en la que todo parece requerir mantenimiento constante, ese silencio operativo es casi un regalo.

Opinión del editor

El Signature Slim Solar+ K980 for Business representa una evolución natural en la visión de Logitech. No aspira a impresionar, sino a permanecer. Es un teclado sobrio, sólido y diseñado para durar. Su energía solar no es una extravagancia, sino una declaración de independencia. Y en un escritorio plagado de cables, esa libertad se siente revolucionaria.

No es un teclado para coleccionistas ni para entusiastas del RGB. Es una herramienta de trabajo en el mejor sentido del término: fiable, cómoda y respetuosa con el entorno. A veces, la verdadera innovación no está en añadir más, sino en quitar lo que sobra. Y Logitech, una vez más, lo ha entendido a la perfección. Vas a poder comprarlo por un precio aproximado de 119 euros en tus puntos de venta habituales.