Desde el lanzamiento oficial de la versión final de Windows 10, en julio de 2015, Microsoft ha hecho todo lo posible para que los usuarios adoptaran rápidamente la última versión de Windows, una versión que a lo largo del primer año estuvo disponible para su descarga de forma gratuita. Muchas han sido las técnicas que ha utilizado Microsoft para que los usuarios aprovecharan esa oferta, bien a través de mensajes continuamente en el sistema operativo o bien realizando la actualización directamente sin consentimiento del usuario, ya que Windows 10 se descarga automáticamente sin que el usuario lo solicitara. Estas actualizaciones automáticas han causado más de un dolor de cabeza muchos usuarios que nuevamente han decidido demandar a la compañía con sede en Redmond.
Esta nueva demanda reúne a un grupo de usuarios que afirma haber perdido toda la información de su ordenador al actualizarse automáticamente a Windows 10, sin previamente haber comprobado cual sería el funcionamiento en el equipo, lo que en ocasiones ha provocado que el equipo dejara de funcionar correctamente o bien que lo alguna parte del ordenador, como puede ser el disco duro, se estropeara por el camino. La denuncia se enfoca en la negativa por parte de Windows 10 a comprobar como funcionará el equipo con esta nueva actualización.
Particularmente sufrí el hecho con contempla este denuncia en un Notebook con Windows 7 Starter. De la noche a la mañana el equipo se había actualizado ofreciendo un rendimiento, ya de por si justo con Windows 7 Starter, penoso, perdiendo muchísimo tiempo para poder realizar cualquier proceso por simple que fuera. Microsoft siempre ha demostrado que lo suyo no son las actualizaciones.
Las dichosas actualizaciones que por un lado bloquean al ordenador al instalarse automáticamente cuando le parece bien, aunque las últimas versiones han mejorado este aspecto, y obligándonos a reiniciar una vez se han actualizado, independientemente de lo que estuviéramos haciendo, lo que nos obliga dejar de trabajar por el tiempo necesario para la instalación, tiempo que en ocasiones puede llegar a ser de hasta 30 minutos.