Netflix, a pesar de no parar de aumentar su catálogo este año, ha decidido dar un golpe definitivo a uno de sus experimentos más interesantes pero también menos populares: el contenido interactivo. A partir del 1 de diciembre, la mayoría de las películas y series que permiten a los usuarios influir en la trama mediante decisiones en tiempo real serán eliminadas del catálogo de la plataforma. Es el fin de una era, más o menos. Te cuento porqué Netflix elimina sus contenidos interactivos y qué quedará en la plataforma. Veamos.
Netflix elimina estos contenidos interactivos
La fecha clave para esta eliminación masiva será el 1 de diciembre. En concreto, solo cuatro títulos de un total de 24 se mantendrán en la plataforma: Black Mirror: Bandersnatch, Unbreakable Kimmy Schmidt: Kimmy vs. el reverendo, You vs. Wild y Ranveer vs. Wild con Bear Grylls. El resto de producciones interactivas, que incluyen títulos como Escapa del Undertaker, Carmen Sandiego: ¿Robar o no robar?, o Bebé Jefazo: ¡Atrapa al bebé!, desaparecerán para no volver.
La decisión llega, según declaraciones de Chrissy Kelleher, portavoz de la compañía, como respuesta a las limitaciones tecnológicas que presenta este tipo de formato. “La tecnología cumplió su propósito, pero ahora tiene sus límites, y preferimos centrarnos en otros esfuerzos tecnológicos que nos resultan más prometedores”, afirmó.
El nacimiento y caída del contenido interactivo
El contenido interactivo de Netflix llegó a la plataforma en 2017, con El gato con botas: Atrapado en un cuento épico como primera propuesta. En este formato, los usuarios podían participar activamente en el desarrollo de la historia, eligiendo lo que debía hacer el protagonista en momentos clave. La idea de trasladar el famoso concepto de los libros de Elige tu propia aventura al formato televisivo fue novedosa y, aunque generó gran expectación inicial, la popularidad de este tipo de contenido disminuyó rápidamente.
De los 24 títulos interactivos que llegaron al catálogo, solo unos pocos consiguieron cautivar al público. El más exitoso de todos fue Black Mirror: Bandersnatch, que en 2018 aterrizó como un experimento narrativo dentro de la famosa serie antológica y logró captar la atención del público global. Gracias a su concepto de múltiples finales y su trama distópica, Bandersnatch se convirtió en uno de los contenidos más discutidos en redes sociales aquel año.
Sin embargo, para muchos otros títulos, la falta de engagement fue evidente. Producciones como Triviaverso, Escapa del Undertaker y Jurassic World: Campamento Cretácico no lograron consolidar un seguimiento significativo y han pasado desapercibidas para gran parte de la audiencia. Netflix, siempre rápida en adaptarse a los intereses del público, ha decidido que ya no vale la pena seguir apostando por este formato.
En busca de nuevos horizontes
El abandono del contenido interactivo coincide con un cambio de rumbo en los esfuerzos tecnológicos de Netflix, que ahora busca enfocarse en otras áreas que puedan generar un mayor impacto en su audiencia global.
Mike Verdu, exlíder de Netflix Games, había adelantado que la compañía dejaría de producir títulos interactivos para centrarse más en el campo de los videojuegos. “Aprendimos mucho de las series y películas interactivas, pero sentimos que la tecnología había alcanzado su límite. Ahora estamos aprovechando esa experiencia para aplicarla en los videojuegos”, comentó Verdu a medios como Game File.
Este movimiento estratégico también coincide con la salida de Verdu del equipo de videojuegos de Netflix, siendo sustituido por Alain Tascan, en lo que parece ser una redefinición de la estrategia de la compañía en este campo. Netflix ha mostrado un claro interés en el mercado de los videojuegos, habiendo ya lanzado su propia sección de gaming en la plataforma con un catálogo creciente de juegos móviles basados en sus series más populares.
Las lecciones aprendidas
A pesar de que los contenidos interactivos estaban bien presentes en la plataforma, es decir, no estaban ocultos, no lograron alcanzar el éxito esperado. Netflix afirma que ha aprendido mucho de la experiencia. La tecnología detrás de estos títulos, si bien ya no es viable para este formato, sí que puede seguir siendo útil en otras áreas, como el desarrollo de juegos narrativos interactivos, un campo que podría tener más recorrido en el futuro cercano.
Por otro lado, la eliminación masiva del catálogo de series y películas interactivas deja a muchos usuarios preguntándose qué ocurrió con títulos que gozaron de gran popularidad entre ciertos grupos, como Carmen Sandiego o Bebé Jefazo. Sin embargo, las cifras de audiencia y el coste de mantener este tipo de contenido parecen no justificar su permanencia en el catálogo. Eso sí, sus juegos en Google Play seguirán activos por mucho tiempo.
Netflix elimina sus contenidos interactivos y demuestra una vez más su capacidad de adaptación a los cambios del mercado. Aunque abandona el formato interactivo, su determinación por innovar no queda en duda, ya que sigue explorando nuevas áreas de entretenimiento que le permitan afianzar su liderazgo en el competido mercado del streaming.