El contenido original de Netflix siempre ha sido una de sus grandes atractivos. Series como House of Cards, Orange is the new black o más recientemente DareDevil o Stranger Things son algunas de las series que se han convertido en sinónimo de Netflix. Pero en esta plataforma de vídeo en streaming, disponible en todo el mundo excepto en cuatro países, no solo podemos encontrar series, sino que también podemos encontrar un gran número de películas, con algo más de dos años de antigüedad que también nos permite pasar un rato entretenido si estamos cansados del modelo de televisión tradicional, donde en ocasiones la película dura menos que la cantidad de anuncios que se emiten entre medias.
El próximo objetivo de Netflix, según ha informado el Director Financiero de la compañía David Wells, pasa por ampliar su catálogo de forma que prácticamente la mitad de todo el contenido sea de producción propia. Wells afirma que la compañía está experimentando una transición de varios años para poder centrarse principalmente en el contenido original, que es el que realmente llama la atención de los usuarios y que puede ser motivo más que suficiente para decidirse entre una plataforma de vídeo en streaming u otra.
Netflix quiere ampliar el importe destinado a las series pasando de los 5.000 millones de dólares actuales hasta algo más de 6.000 en 2017. Según Ted Sarandos, Director de contenido de Netflix, los costes de producción están siendo cada vez más reducidos lo que permite a la compañía elegir entre un gran número de proyectos que les llegan casi todos los días a sus oficinas.
Cabe recordar que Netflix no produce los episodios, sino que los compra en exclusiva directamente a las productoras que se encargan de todo el proceso. De esta forma la plataforma tiene siempre un amplio abanico donde elegir sin arriesgar en costosas producciones que no tienen el éxito asegurado.