A pesar de que Samsung no ha querido desvelar de forma oficial su nuevo phablet o mejor dicho su nuevo buque insignia, lo cierto es que las informaciones sobre el nuevo Samsung Galaxy S8 no paran de fluir y sorprender a los usuarios.
Lo último que hemos conocido sobre el nuevo móvil de Samsung es el procesador y GPU que el Samsung Galaxy S8 llevará. El nuevo phablet llevará el procesador Exynos 8895, un procesador que tiene velocidades altas pero que seguirá teniendo la tecnología de 10 nm, tecnología que ya utiliza otras marcas de procesadores como Mediatek. Lo que si desconocemos es la velocidad determinada así como si es un procesador de ocho núcleos o de diez núcleos. Pero si sabemos que tal procesador irá acompañado de una GPU bastante potente, posiblemente la más potente del mercado. Nos referimos a la Mali-G71, una nueva versión de la GPU más famosa que no sólo aumentará su rendimiento en 1,8 veces sino que además será más potente que la propia Adreno 530.
La nueva Mali-G71 que acompaña al Exynos 8895 confirma la resolución 4K
Esta Mali-G71 no solo será más eficiente energéticamente sino que además ofrecerá grandes resoluciones y la posibilidad de resolución 4K de manera nativa. Algo que no sólo es interesante para los usuarios sino que encaja con las informaciones que tenemos del móvil pues se hablaba de una pantalla con resolución 4K, así pues el Samsung Galaxy S8 ofrecerá resolución 4K e incluso será compatible o uno de los terminales que mejore la experiencia VR y el uso de la plataforma Daydream.
Sin embargo, el tema más interesante no se menciona ni en las filtraciones ni en los papeles de Samsung, es decir, no se habla si tal potencia tendrá una refrigeración adecuada, algo que siempre dábamos por supuesto pero que en el Samsung Galaxy Note 7 no ha pasado así y es uno de los graves problemas que Samsung tiene que hacer frente, más aún que el hardware del nuevo Samsung Galaxy Note 7 ¿no creéis?