Uber acaba de confirmar oficialmente que las cuentas de 57 millones de usuarios fueron pirateadas el pasado mes de octubre de 2016. La confesión mantiene que las cuentas hackeadas son de sus propios clientes y entre ellos no se escapa ninguno, ni los conductores.
Esto es bastante grave y más teniendo en cuenta que la compañía realizó un pago de más de 100.000 dólares para ocultar el hackeo. Ahora cuando ya ha pasado más de un año aparece un comunicado oficial en el que se explica que su base de datos almacenada en Amazon Web Services, fue vulnerada por piratas informáticos.
El comunicado advierte que todos los datos de estas personas añadiendo desde los números de teléfono, las direcciones, los números de licencia junto con todos los nombres y direcciones de correo fueron obtenidas por los hackers. En el caso de los conductores de Uber afectados por este problema se hace referencia únicamente a los residentes en Estados Unidos y en ningún caso se habla de otros países. La recompensa obtenida por los hackers y pagada por Uber consiguió el acuerdo de eliminación de los datos obtenidos y que esto no saliera a la luz.
Al final aparece el informe directamente desde la propia web de Uber y revela todo lo ocurrido en es ataque informático. Además la compañía añade una opción para certificar que no eres uno de los afectados por este hackeo que se produjo el año pasado en el caso que seas conductor, puedes visitar los datos desde este enlace. Y es que nadie está a salvo de ser hackeado y las grandes compañías son siempre las más buscadas para obtener una recompensa económica. No hace tanto que en España miles de ordenadores de Telefónica padecieron un ataque de ramsomware que dejaba lo mismos inutilizados durante unas horas a cambio de una recompensa económica solicitada por los hackers.