Las restricciones al acceso de información son algo desgraciadamente algo muy habitual en Internet en estos últimos años, a pesar de que debería ser todo lo contrario, pero lo políticamente correcto es lo que se lleva y si no vas por ese camino, puedes ser centro de la polémica por algún grupo determinado de personas o asociaciones.
El último comunicado de la compañía, la compañía firma que dejará de filtrar el contenido que se puede encontrar en Steam, de forma que cualquier usuario podrá subir cualquier tipo de juego, siempre y cuando no sea una copia que la plataforma considere ilegal o un trolleo. La compañía afirma que deben ser los propios jugadores quien decidan que juegos y que no juegos son aptos para sus gustos o intereses.
Valve sabe que este movimiento puede levantar la ira de algunos colectivos con la llegada de determinados juegos, pero según afirma hay que anteponer la libertad por encima de cualquier otro aspecto, una libertad que en los últimos años ha comenzado a limitarse en demasía.
A pesar de que la plataforma de juegos Steam gana dinero a través de cada juego que llega a la plataforma, hasta el momento, Valve se había encargado de supervisar y censurar, en su caso, los juegos que podrían suscitar o promover movimientos de odio hacia algunos colectivos.
A partir de ahora, es más que probable que comiencen a llegar a la plataforma juegos que habitualmente nunca han estado disponibles debido a la censura que aplicaba la compañía como juegos de índole racista, sexista, de violencia de género, de índole político… Cada persona es libre de elegir a que juegos quiere jugar y siempre y cuando los jugadores tengan dos dedos de frente, estos saben diferenciar entre la realidad y la ficción. En años anteriores, Valve había sido centro de alguna polémica por impedir o eliminar la llegada de juegos de índole polémica a la plataforma.