Hace unos años Xiaomi era el rey del mambo en China. Sus terminales eran los más vendidos en todo el país sobre todo gracias a los diseños muy similares al iPhone. Pero Xiaomi no sólo vende smartphones sino que además también se ha metido en los dispositivos de consumo como básculas, routers, wearables, set-top boxes… este tipo de dispositivos si que se pueden encontrar con facilidad fuera de China pero los smartphones y tabletas no. El motivo no es otro que el uso que hace de algunas patentes sin pasar por caja.
China siempre ha sido muy proteccionista con sus empresas de ahí que ninguna compañía sabedora de que sus patentes se utilizaban sin permiso han querido meterse en juicios, porque tenía todas las de perder. Pero parece que eso está a punto de acabar, ya que la compañía ha anunciado que ha llegado a un acuerdo con Nokia para poder hacer uso de sus patentes y poder así lanzarse de forma internacional y vender tanto sus smartphones como tableros en todo el mundo sin problemas que paralicen las ventas.
Xiaomi ha visto como sus más directos competidores en el país le han ido comiendo terreno y desde hace algo más de un año, ya no es la empresa que más terminales pone en el mercado. La internacionalización de la marca conllevará un incremento en el precio de sus dispositivos por lo que cuando comiencen a venderse legalmente y con garantía directa fuera de sus fronteras, mucho va a tener que ajustar el precio de sus terminales para que siga siendo una opción a tener en cuenta.
Este acuerdo permitirá que ambas empresas hagan uso de las respectivas patentes para diseñar nuevos productos. El último nicho de mercado donde ambas compañías quieren meter la cabeza en el Internet de las cosas, donde Nokia ya dio sus primeros pasos tras la adquisición de la firma francesa Whithings. Pero además también quieren adentrarse en el sector de la realidad virtual otro de los sectores más interesantes para los usuarios.