No se puede decir que la respuesta de Intel ante el problema de Meltdown y Spectre fuera lenta, pero eso a su vez trae consecuencias como las que están sufriendo algunos usuarios en sus equipos. Estos problemas se manifiestan una vez actualizado el problema de seguridad en los equipos que tienen menos de 5 años de antigüedad y se traducen en reinicios inesperados del equipo.
La fuerte presión a la que está sometida el fabricante después de descubrir el problema hace que la respuesta tenga que ser prácticamente inmediata y esto puede traer consecuencias como las que estamos viendo. La propia solución se convierte en otro problema inesperado para la compañía que no parece levantar cabeza en este sentido.
El propio medio de The Wall Street Journal, ha tenido acceso a varios documentos de la propia Intel en la que avisa a varios de sus clientes -fabricantes de ordenadores y proveedores de servicios en la nube- de este posible fallo una vez instalado el parche, que a su vez soluciona el fallo de seguridad Meltdown y Spectre. Después de todo el revuelo finalmente han tenido que realizar otro comunicado público en el que advierten que los procesadores afectados con los reinicios son los Broadwall y Haswell,
Lo dicho, un pequeño desbarajuste en la tranquilidad que tenía Intel durante muchos años y que ahora podría hacer inclinar la balanza de los fabricantes de ordenadores hacia otros fabricantes a pesar que tampoco están exentos de problemas de seguridad o estabilidad. Las noticias siguen llegando en cuentagotas y las mejoras que tenemos que ver en estos procesadores en cuanto a la seguridad no están del todo aclarados, además los parches lanzados parecen añadir más problemas que otra cosa. Esperemos que pronto se encuentre el camino y la solución puesto que no es nada agradable para nadie tener esta incertidumbre.
Sé el primero en comentar