A nadie pilla por sorpresa si hablamos de la guerra que a día de hoy tienen prácticamente la totalidad de empresas que se dedican casi en exclusiva al desarrollo y producción de nuevos procesadores. Muchas de ellas, como puede ser Samsung literalmente están un paso por delante gracias a que ya dominan procesos de fabricación que para otras, como puede ser Intel, se complican en exceso.
Aun así, lo cierto es que hablamos de un mercado muy amplio y sobre todo capaz de ofrecer unos beneficios literalmente enormes, algo que hace que todo tipo de empresas quieran entrar a pesar de que las barreras de acceso son mucho más potentes de lo que podemos llegar a imaginar. Debido a esto, quizá, es por lo que en este mercado parece que tan sólo un puñado de compañías siguen vivas, multinacionales que responde a nombres tan afamados como Samsung, Intel, TSMC o GlobalFoundries.
Samsung y ARM prometen procesadores de 7 nanómetros capaces de romper la barrera de los 3 GHz
Lejos de todo esto lo cierto es que en la próxima generación de smartphone parece que se está imponiendo el uso de procesadores fabricados en 7 nanómetros, algo que traerá grandes ventajas para los usuarios ya que este proceso permitirá que, en el mismo tamaño, se puedan incluir muchos más transistores lo que aumentará la potencia de cálculo a la vez que se reduce el consumo energético e incluso el calor generado durante el funcionamiento de los mismos.
Debido precisamente a que el uso de procesadores fabricados en 7 nanómetros es algo que se impondrá en el mercado en la próxima generación de smartphones de gama alta, hay que marcar la diferencia en alguna de sus características y es en este punto precisamente donde entra la colaboración que desde hace tiempo tienen Samsung y ARM ya que ambas compañías han anunciado que sus chips serán capaces de alcanzar, y más adelante incluso superar, los 3 GHz de sus núcleos de alto rendimiento ARM Cortex-A76.
Como detalle, comentarte que esta colaboración finalmente se traducirá en la llegada al mercado de un procesador que previsiblemente será el encargado de sustituir generacionalmente al Snapdragon 845 o al Exynos 9810. Como detalle, comentarte que, en cuanto a fuerza bruta, actualmente el récord lo tiene el procesador Exynos de Samsung gracias a sus 2’9 GHz.
Samsung comenzará la fabricación de sus procesadores de 7 nanómetros este mismo año
Entrando un poco más en detalle, tal y como ha sido desvelado, gran culpa de este aumento en la velocidad de los procesadores se debe a las prestaciones conseguidas por la plataforma Artisan Physical IP desarrollada por ARM cuyas ventajas se aplicarán en un primer momento en los 7 nanómetros de Samsung para, posteriormente, llegar a los procesos de 5 nanómetros.
Si atendemos a las fechas, tal y como ha desarrollado Samsung, la empresa comenzará a fabricar sus chips en 7 nanómetros durante esta segunda mitad de 2018 mientras que, para iniciar con la fabricación de la esperada generación de litografía ultravioleta extrema tendremos que esperar al año que viene ya que, a pesar de que todo el mundo esperaba que se iniciara este mismo año, lo cierto es que se ha incurrido en un aumento de los costes, lo que ha incurrido en una mayor inversión.
Personalmente he de confesar que me llama bastante la atención cómo Samsung, conjuntamente con ARM, han sabido dejar de lado todas sus diferencias para colaborar y llegar a convertirse en un referente dentro de este caótico y competitivo sector del mercado mientras otras, como puede ser la antaño todopoderosa Intel, parece que evolucionar y adaptarse les cuesta más de lo esperado. No en vano mientras Samsung y ARM nos hablan de procesadores de 5 nanómetros, Intel aún no ha comenzado a distribuir procesadores de 10 nanómetros, a día de hoy llevan años de retraso, algo que ya les ha hecho perder el liderato en fábricas. Como punto a favor de Intel, comentar que la dificultad entre fabricar procesadores para móviles y para ordenadores de escritorio no es la misma aunque, a día de hoy, son muchos los expertos que consideran que esta distancia ya es excesiva.